Originales y Réplicas ¿Qué opinan?

depto51 - 3 marzo, 2014 - 18 comentarios

Hoy quiero conversar sobre este tema que cada vez es más común en nuestro país. Muchas tiendas ofrecen réplicas de sillas y muebles emblema del diseño a precios que son muy tentadores para todos y que nos hacen preguntarnos sobre cuán legítimo es este negocio. Cuando en la música, el cine, el arte, la política o la arquitectura se descubre que alguien copió, imitó, falsificó o plagió a otro autor, todos nos escandalizamos. Pero cuando tiendas y multitiendas ofrecen versiones baratas (y no tan baratas) de sillas de Philippe Starck, Eames, Bertoia o Hans Wegner generalmente pensamos «uuuuy qué tentación». ¿Por qué nos pasa esto? ¿Por qué sentimos que el diseño tiene más permiso para ser plagiado que otras disciplinas?

Una réplica puede parecerse mucho al original pero hay algo en ella que es diferente. No es sólo su calidad y sus materiales, sino que también es el alma, el trabajo y el espíritu del diseñador que hay detrás de cada creación. Por otra parte, uno puede defender las réplicas diciendo que es una buena forma de acercar el diseño al «pueblo» y que los diseñadores deberían pensar sus productos de manera que el precio final de éste fuera accesible para la mayoría y no necesitara replicarse.

Me gustaría saber qué piensan ustedes al respecto. Por mi parte, no les niego que tengo un par de réplicas en mi casa pero que también me molesta mucho cuando diseños chilenos o más contemporáneos son vilmente copiados por distintas tiendas. ¿Qué opinan?

Para graficar este post, les dejo algunas de las sillas y mesas más replicadas en el mundo:

sillas y pisos tolixSillas y Pisos Tolix de Xavier Pauchard

verner panton chair

Silla Panton de Verner Panton

sillasbertoia

Silla Bertoia de Harry Bertoia

masters chair starck

Silla Masters de Philippe Starck

 

ghost chair starck

Silla Ghost de Philippe Starck

mesanoguchi

Mesa Noguchi de Isamu Noguchi

Platform Bench Perchero Eames

Perchero Hang it All the Charles y Ray Eames y Platform Bench de George Nelson

Eames Rocking Chair

Silla Rocking de Eames

The-Egg-Chair-by-Arne-Jacobsen-and-Fritz-Hansen-081

Silla Egg de Arne Jacobsen y Fritz Hansen

eames lounge chair

Silla Lounge de Eames

Wishbone chair Hans Wegner

Silla Wishbone de Hans Wegner

18 comentarios

  1. Soy diseñadora y no estaría dispuesta a aceptar el plagio de mis productos, pero creo que los diseñadores debemos acercarnos a los requerimientos de todos más que de un grupo selecto, y en todo sentido (forma, materialidad, precio). Las mesas y sillas que se ven en las fotos tienen precios prohibitivos, que algunas veces superan en 10 veces el precio de sus réplicas, entonces ¿por qué tendría que optar por un original si hay un extenso mercado con productos igualmente buenos y a precios justos? ¿Sólo porque tiene la firma del diseñador? Creo que es un abuso.

  2. Que buen tema, pero es verdad mucha gente nunca va a entender porque gastar una tremenda cantidad de dinero por una silla si puede comprar una muy similar en prácticamente nada, Sobre todo si no tiene cultura de diseño. Creo también que es inevitable caer en replicas de clásicos que ya tienen cierta antigüedad y que por ende un original es prácticamente inasequible y las replicas son masivas y por ende alcanzables. Lo que encuentro inadmisible es la copia de diseñadores emergentes por parte de sus mismos colegas eso agota y hace que veamos siempre mas de lo mismo.

  3. Creo que no puede haber una única respuesta. Hay diseños que cumplieron 50 años y es razonable pensar que ya forman parte de ese colectivo intelectual llamado «dominio público» otros donde sus creadores ya llevan Bren tiempo muertos e incluso sus herederos ya gozaron largo tiempo de las justas regalías. generalmente en esos casos los precios no guardan ninguna relación con los costos reales de materiales ni manufactura y ahí la réplica viene a ser casi un acto de justicia (casi, no es pa ponerle tanto). En el caso de diseñadores emergentes y los que tienen pequeñas fábricas en cambio la réplica es simplemente plagio y daño.

  4. Son sillas. No le demos más color. No puede ser que la patente de un mediacamento, algo que implica mucho trabajo, mucha inversión, mucha gente, la mejor, mucho compromiso, que algo así tenga una patente que restringe su réplica por 10 años y a unas sillas más onderas o más cómodas que otras sean eternas. Las patentes debieran existir en relación a cuánto trabajo implicó hacerla, inventarla. El aporte a la sociedad del que mantiene su patente por años es poco y su avaricia un asco.

  5. No apoyo el plagio (aunq a veces no es tan plagio por que tienen permisos), pero los precios son impagables por gente razonable, yo no estoy dispuesta a pagar 800 mil pesos por una silla de diseño, no puedo ni aunq pudiera lo haria en un pais donde la desigualdad economica es tan impresentable…. prefiero darle la diferencia a mi nana para que se vaya a Peru a ver a sus hijos antes q cometer tal aberracion, de hecho lo hago. La solucion es no comprar, diran ustedes, pues estoy de acuerdo, no compro diseño. Hoy en dia hay muchas alternativas lindas a precios razonables, ademas la calidad es pesima, compre hace ya años varias cosas, una lampara blanca hongo q al poco tiempo se transformo en amarilla, una mesa eames que ya no le queda cubierta y un par de lamparas tolomeo que al mes no funcionaban, compre la copia, casi tan cara como la original y duro menos que un candy.

  6. Ahora tampoco hay q ser taaan graves, a todos nos gusta tener la sillita eames que le da todo el touch a ese rincon y como el 99,9% de los chilenos no podemos pagar la original, recurrimos a la copia certificada jaja…. como todo en la vida, no abusar, ademas q hollible tu casa entera «popular diseño» no?, q falso y poco honesto.

  7. Si un diseño es bonito, funcional y se vuelve un objeto de culto eso quiere decir que el diseñador logro llegar a la gente …..por qué entonces no hacerlo más accesible? Ese objeto logro ser lo que es porque la gente lo acogió y le dio un lugar en sus casas . Personalmente tengo un par de sillas réplicas y no me siento avergonzada por eso . Ahora creo que los objetos de diseño debieran ser más accesibles ya que, sus precios desorbitantes es uno de los motivos ( diría el más importante) por el cual las copias tienen tanta aceptación.

  8. Creo que réplica e plagio son cosas diferentes. Creo que para diseños viejos (aunque super actuales) que llevan más de 25, 30… 40 años… hasta 50 años!!!… es muy justo que haya réplicas disponibles. Claro que para mi también es importante que sean réplicas que estén a la altura de las versiones originales, buenas réplicas y a precios accesibles (lo que no quiere decir regaladas). En el caso de los diseñadores nuevos y emergentes entiendo que deben gozar de los privilegios de tener un diseño inovador, para eso deben registrar sus innovaciones resguardándose de posibles plágios. Y si encuentran que fueron copiados de mala fe, deberán ir a la justicia a hacer valer sus derechos. Pero acá creo que otro tema interesante es el precio del diseño. Soy muy a favor de marcas que ofrecen productos con un diseño inovador, diferente, cuidado a precios accesibles. No creo que todo producto de diseño deba ser caro. Excepto que sea una edición super limitada, numerada o que use materiales muy pero muy exclusivos. Pero ahí ya estaríamos hablando de excepciones. En líneas generales creo (y trabajo) para que todos tengamos cosas bonitas y buenas en casa. Saludos!

  9. En nuestro Chile aspiracional las réplicas son la opción. Prefiero buscar otros muebles, no imitaciones de… aunque está claro que gran parte del retail está «inspirado» en muebles de diseñador… algunas pasan más piola, otras son claras copias.

  10. Yo no apoyo las copias, creo que es mirar en menos y no respetar el trabajo de la persona que las diseño. Desde que vi la silla Tolix, la amé y quería tenerla en mi comedor, como cada una vale lo mismo que un comedor completo en algún retail, juntamos las lucas hasta que nos dio para comprarlas, y son otra cosa! Las replicas son toscas, opacas y livianas, nada que ver con la original, y he visto tiendas de retail y en barrios de diseño en donde venden la copia casi al mismo valor que la original.

  11. Creo que lo más divertido es el mero concepto de «replica»… casi casi suena lícito, la palabra pareciera encerrar un concepto más allá, tal vez un trato con el autor, que preferimos no preguntar. The popular design vende productos que son COPIAS de diseños altamente reconocidos, hechos en taiwan, así de claro.

    Tampoco están robando a niños en áfrica, así que tranqui, por comprarse una Pantone a 40 mil pesos y bajar una que otra peli de internet no va a morir ningún panda.

  12. Chile aspiracional. No lo sé, pues en el fondo quisiera que las personas pudieran aspirar a un concepto elaborado, a una idea, al diseño de un objeto mas allá de lo funcional, que superaran el producto chino en su reproducción masiva o al menos que salieran del post formado de Franklin. Que algunos lo usen para manifestar un status distinto, no les desmerece el genuino interés por el arte en su dimensión mas publica. Tampoco creo que pase por que el diseño pueda ser mas económico, porque me resulta abrumador pensar que el diseñador como artista requiera de la venta de sus piezas para vivir, cuál seria el precio justo? Creo que el punto medio lo encontraríamos en que la venta sea a través de tiendas que pudieran vender las piezas protegidas como diseño, potenciar el diseño, con formas de pago accesibles, y comercio justo. No se que opinión tendrán de Ikea, pero ellos promueven el diseño en artistas jóvenes, les ofrecen una plataforma para sus diseños, que es sustentable para ellos y accesible al consumidor. Al final del día, cada parte debe preocuparse de lo suyo, el diseñador de crear, la tienda de vender, y la gente de disfrutar del diseño.

  13. La «cultura» del diseño se va al carajo cuando tienes un sofá que cuesta más de 3 millones de pesos y la réplica 150 mil. Díganme si no es placentero llegar a tu casa y no solamente sentirte cómodo sino reconfortado por la estética de esas malditas copias.

  14. Yo creo que los aspiracionales son ustedes. Ustedes que aspiran a ser los más originales de Chile, de Santiago en realidad; que aspiran a ser los más reconocidos en el mundo entero por alguno de sus diseños alguna vez en la vida, que aspiran secretamente a tener una silla con su apellido, que todos replican y que todos quieren en su casa. ¿Cuando van a entender que ustedes los diseñadores no son más que los otros, que son iguales no más y que cuando alguno le da el palo al gato con algún diseño está feliz de la locura que provoca en la gente y está feliz que esa gente que lo «reconoce» compre sus réplicas, porque eso es alcanzar el Olimpo… los grandes diseñadores están felices de ser copiados, sólo los mediocres y los malos-malos quieren guardar sus diseños en secreto.
    Habrá alguna vez algún artículo mundialmente famoso y reconocido que salga de Depto51?… ojalá que sí , a ver si eso no es ser aspiracional. Cuidado con los adjetivos que tiran con rabia porque se les van a devolver… como ahora mismo.

  15. Compre una replica tolix y la verdad es que hasta en las mimas replicas se ve una variación de precio, compre un de esas sillas en 26.000 y encontré las mismas replicas en 45.000, si pague 26.000 y me duran 6 años cumpliendo su función (sentarse) me doy por pagada y encuentro innecesario comprar una original, quizás tendría una de 1934 para lucirme frente a mis amigos, pero la verdad solo quiero que se sientes para que carreteemos.

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  18. Está claro que una réplica, copia, imitación o como se quiera llamar es una oda al buen diseño, ese que ha soportado décadas y que se proyecta casi infinitamente en el futuro. No hay nada que supere eso.

    El mueble original se refiere al fabricante no al diseño, me explico? un original Eames es un Herman Miller/Vitra, un original Wishbone es un Carl Hansen, un Tullip es Knoll, creo que esto es escencial para entender realmente de que se esta hablando. Comprar un original es garantía casi de porvida, comprar una mala réplica China (hay de excelente calidad certificada también), a menudo te pondrá en una posición que comprometerá tu ética por diversos motivos: 1.-contribuyes a aumentar la basura en el planeta. Si, a menudo se romperan al poco tiempo, no son o serán revendibles y terminarán en vertederos prontamente. 2.-Contribuyes al apoyo de condiciones de abuso para la mano de obra. 3. Terminaras comprando más de lo que necesitas eventualmente y con una eterna sensación de insatisfacción.

    Comprar un original es garantía que esa gran cantidad de dinero que inviertes, al momento de querer vender será la misma o incluso de mayor valor que cuando la compraste, su lógica es de un ítem de colección, su uso es un plus y no un motivo de devaluación, los años y fechas de fabricación son valorados y tasados de modos distintos.
    Una Eames lounge chair ,Herman Miller (USA) o Vitra (Suiza) o incluso Hille International (UK). se valoran mucho más usadas de ciertos periodos de fabricación (50’s-70’s) que nuevas…a propósito, sabían que en los 70’s en Chile se fabricaron muebles bajo la representación de Knoll?.

    A mi parecer en los 70’s surgió el único orgullo nacional (a mi parecer) hasta el presente que es de calidad mundial; El diseño y fabricación de las Sillas Valdés que hasta la fecha ha mantenido fieles sus principios de producción artesanal de calidad.

    Si se quiere entender el valor de millores de pesos por un mueble, sugiero se puedan dar la oportunidad de verlo por todas partes y encontraran que la calidad es sinónimo de perfección en la manufactura y elección de materiales nobles, a menudo valor traspasado por la calidad de los procesos de fabricación por varias generaciones, la tradición es valorada en su precio de venta y re venta si les es posible comprarlo es una inversión que a menudo no se devalúa y que incluso subirá su valor en el futuro.
    Si quieren constatar que pasa en Chile con el diseño y manufacturación (Exceptuando Fernando Mayer), sugiero den una vuelta por cualquier tienda de fabricación Chilena y vean el mueble por debajo y se encontraran con su real valor, a menudo es decepcionante.

    Finalmente creo que los muebles clásicos modernos son y serán invatibles en valor, Sencillamente creo imposible que el fenómeno de diseño y producción que se dió desde los años 30 hasta finales de los 70 se dé nuevamente por las actuales y futuras condiciones de contexto económico, industrial, cultural, politico, etc.

    Sólo el tiempo dirá cuantas réplicas chinas soportarán el paso del tiempo. Hablemos en 20 años más.

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