¡No saben lo ricos que son estos galletones! Crujientes por los bordes y perfectamente chiclosos y húmedos al centro con nueces y chocolate picado que tibio son piscinas de chocolate derretido y frías son mas crunch aun! Exquisitas y muy intensamente chocolatosas.
¿La buena noticia? Que si eres celíaco o intolerante a la lactosa, esta receta de galletas de chocolate es totalmente apta para ti porque no tienen harina ni lácteos. ¿La noticia más o menos?, que por mucho que traté de hacerlas completamente “free”, el azúcar una vez más probó ser un mal necesario en términos de textura, estructura y sabor final, pero bueno! (no sé si es un tema de costumbre, pero no soporto el sabor amargo/metálico/químico que dejan los endulzantes al final).
Para aumentar la crocancia, y potenciar esa costra craquelada que tienen, agregué una cantidad mínima de almidón de maíz y no puedo dejar de recalcar lo importante que es usar un buen cacao y chocolate, ya que estas recetas simples se apoyan mucho en la calidad del producto.
En fin, como les contaba, lo único gordo de estas galletas es la cantidad de azúcar que tienen, ya que al no tener lácteos son bajas en grasa. Tienen frutos secos, en este caso nueces, que aportan ácidos grasos “buenos” y flavonoides y antioxidantes del chocolate amargo, yo usé Callebaut 70%.
Para unas 10 a 12 porciones necesitan:
- 1 1/2 taza de azúcar flor
- 1/3 de taza de cacao en polvo
- 3/4 de taza de nueces
- 1 cucharada de Maizena
- 1 pizca de sal
- 75g de chocolate amargo (el mejor que puedan)
- 2 claras de huevo
Midan bien los ingredientes secos, no me canso de reafirmarlo, pero cuando digo tazas me refiero a las tazas de medida standard que venden en juegos, las gringas, no la taza de café ni el mug. Mezclen todos los secos en un bol. Piquen bien las nueces para que queden bien dispersas en la masa y no queden pedazos grandes en una galleta y otras casi sin. Piquen también el chocolate e incorporen las dos cosas a los secos.
Separen los huevos y viertan las claras sobre la mezcla de secos. Batan con un batidor y miren como la mezcla se hace nada, va a resultar una mezcla densa que después tienen que porcionar sobre una lata con papel mantequilla dejando bastante espacio entre cada una porque esparcen bastante. Yo use un “Cookie Scoop” Wilton que compre en CookStore y las deja todas parejas.
Horneen por 20 minutos a 180ºC, y esperen a que se enfríen un poco para sacarlas con una espátula, así evitan que pedazos se queden en la lata. Si tienen 2 latas y alcanzan a meterlas al mismo tiempo acuérdense de rotar las latas a la mitad del tiempo para que se hagan parejas. Mi horno es chico así que no tengo ese problema, pero siempre lo veo en videos o lo leo en recetas y suena como algo muy que se dice. Una vez que enfríen, guárdenlas tapadas para que no se sequen, porque no tienen tanta materia grasa que las mantenga húmedas.
Son super fáciles y rápidas de hacer, demoran más en el horno que en hacer la masa, ¡y no me imagino nada mejor que una casa con olor a galletas! Tanto así que he hecho galletas no para comer, sino como una especie de Glade “Galletas de Mamá” o algo así jajaja, y de repente es bueno tener una receta a prueba de yuyines bajo la manga para salir del paso. Lo mas técnico que tiene la receta es separar huevos…
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