El proyecto de Casa de Oficios es uno de los más inspiradores que hemos conocido últimamente. Convencidos del valor que tienen los oficios y la importancia de rescatarlos, en esta casa se comparte conocimiento, se aprende y se usan las manos. Los invitamos a recorrer este espacio construido paso a paso y con mucho cariño por Teresa Díaz y Tomás Cortese.

Fotos por: Elisa García-Huidobro

¿Desde cuando que están aquí?
Casa de Oficios nace en el año 2012 dentro de una casa antigua en el Barrio Italia. Estamos en esta casa desde abril de este año y hasta ahora ha funcionado fantástico, siendo una casa generosa, entretenida y llena de rincones.

¿Cómo nació la idea de instalarse aquí?
Buscamos casi por un año un lugar para cambiar a Casa de Oficios a una nueva sede. Este nuevo lugar debía cumplir con varios requisitos: que fuera una casa antigua, que tuviera el mismo ‘espíritu’ de la casa anterior y que contara con varios espacios distintos para desarrollar los talleres. No fue fácil….hasta que un muy amigo nuestro nos ofreció su casa para usarla como Casa de Oficios y todo fue calzando, los tiempos, el lugar, los espacios, el barrio y la cercanía al metro.
Trabajamos dos meses haciendo algunos arreglos en la casa, por ejemplo habilitamos una terraza exterior para convertirla en la sala de cocina o rebajamos ventanas para que entrar más luz. Pero la casa estaba muy bien tenida por lo que no tuvimos que hacerle mucho.

¿Cómo te organizas cuando trabajas, dónde anotas tus ideas, qué comes/tomas etc?
Como Casa de Oficios ofrece un gran número de talleres diarios, tenemos que estar coordinando muchas variables a la vez tales como las salas, horarios, profesores, alumnos y mil detalles que van apareciendo en el día a día. Tenemos un gran calendario impreso en papel que está pegado en la pared y ahí vamos anotando absolutamente todo con post its de colores.
Usamos la tecnología que tenemos a nuestro alcance y la complementamos con el mundo análogo. Por ejemplo trabajamos con programas en línea que nos simplifican la vida pero a la vez usamos el papel, rayamos las ideas y tenemos lápices de colores de todos los colores y sabores.

¿Cómo es el ambiente de trabajo?
Es un ambiente súper acogedor, como buena casa antigua tiene suelos de madera y techos altos, siempre hay buena música y mientras estamos trabajando en la coordinación y administración nos vamos topando con los talleres de pastas, ilustración, costura, etc., en donde uno puede entrar a mirar e inspirarse (o comer algo rico que estén preparando).

¿Cómo te apropiaste del lugar?
El lugar tiene una decoración bastante ecléctica porque junto con el rescate de oficios antiguos, hemos ido rescatando y coleccionando muebles de demoliciones, herramientas viejas, balanzas, canastos y un sinfín de cosas. En la entrada de la casa hay un mural maravilloso con todas la herramientas que hemos ido juntando, muchas de ellas nos las han regalado. Nos gustan porque son unas reliquias, que han sido usadas por manos incógnitas para hacer un oficio.

¿Qué música se escucha aquí?
Desde Ella Fitzgerald, pasando por la Flauta Mágica de Mozart hasta el grupo Beirut. Mix total!

¿Tienes plantas/mascotas?
No podemos tener mascotas porque puede entorpecer el desarrollo de los talleres.
Tenemos una colección de suculentas que hemos ido cuidando desde que nació Casa de Oficios hace ya cuatro año. Lo que nos gustan de las suculentas es que son plantas generosas, se reproducen fácilmente y son fieles. También tenemos un jardín escondido que en primavera se transforma y se llena de flores como la flor de la pluma, madreselva y un jazmín que además de ser lindos llenan de olor. También tenemos un mandarino, un limón y un damasco muy generosos.

¿Sientes que «la hiciste»? Si sí, qué logros te hacen sentir exitoso y si no, cuál es el camino que estás tomando para llegar a eso.
Difícil pregunta…. No creo que la “haya hecho” sino que pienso que encontré lo mío, encontré algo en donde confluyen mis intereses profesionales, familiares y creativos. Encontré mi espacio y creo que en estos años he ido desarrollando y potenciando mis habilidades. No existen fórmulas mágicas, sino poder encontrar eso que a uno lo hace soñar. Ahora, la pregunta es como convertir esa pasión en algo rentable…. Eso si que es un desafío!

Danos tus consejos para trabajar mejor y seguir siendo creativo
Podría decir que para no perder la creatividad no hay que perder la mano, seguir experimentando, rayando, metiendo las manos en la masa y no dejar nunca de aprender. Es en esos miles de intentos al hacer una y otra vez las cosas, cuando aparece lo inesperado. Eso para mi es un acto casi mágico.