Siguiendo un poco con la temática de la cama baja llegué al mundo de las paredes pintadas por la mitad o, aún menos, pintadas a un cuarto. Y es que para vivir más cerca del suelo es necesario generar una escala apropiada. En estas imágenes la pintura acompaña a la mesa, el sillón o la mesada para darle un espacio propio. Queda sobreentendido que ese mueble ocupa ese lugar y ningún otro. Se reconocen las líneas predominantes del lugar y se acentúan. Lindo, ¿no? Para más tips nos vemos en SinPecadoConcebida